Espejito espejito, dime…
El espejo no miente. Al menos, eso es lo que queremos creer. Si eres como la mayoría de la gente, no saldrás de tu casa antes de hechar un vistazo al espejo (un vistazo muy largo para algunos). Sólo quieres asegurarte de que todo se ve bien. Si no, harás lo que sea necesario para asegurarte de que te gusta lo que ves en el espejo. Tomas el tiempo necesario para corregir las «imperfecciones» que se reflejan en el espejo.
Sin embargo, el espejo tiene algunas limitaciones. Sólo será capaz de reflejar tu apariencia externa. Todo podría verse perfecto en el espejo, pero esa ‘perfección’ no significa necesariamente que no hay problemas ocultos. Podría ser posible que haya algunos problemas de salud comenzando a afectar tu cuerpo. La gente todavía podría verse perfecta en el espejo, pero con una enfermedad como el cáncer afectándole los órganos internos. Por esta razón, los médicos recomiendan ciertas evaluaciones para las personas en algunos grupos de edades, y para las personas predispuestas a ciertas condiciones de salud. De esta manera se pueden descubrir los problemas antes de que sea demasiado tarde.
Lo mismo ocurre con nuestra vida espiritual. El espejo te dice «eres una buena persona, no has matado a nadie, no mientes …», pero la Biblia dice:
pues todos han pecado y están privados de la gloria de Dios – Romanos 3:23
Pero el espejo no miente! ¿En serio? Tu vida espiritual podría ser perfecta en el espejo, pero, ¿hay algún cáncer espiritual matándote? Es mejor descubrirlo ahora, o podría ser demasiado tarde. Es necesario un examen para asegurarse de que todo está bien; tenemos que abrir nuestras Biblias y comenzar a leer nuestro diagnóstico. Desafortunadamente para nosotros el diagnóstico es un pecado canceroso que conduce a la muerte.
Porque la paga del pecado es muerte – Romanos 6:23a
Pero la Biblia ofrece mucho más que un diagnóstico, sino que también nos ofrece la receta necesaria para el tratamiento de nuestros problemas: Jesús. Y diferente de la mayoría de procedimientos y recetas médicas, Jesús ofrece la sanidad, y esta de forma gratuita.
mientras que la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, nuestro Señor. – Romanos 6:23b
Él fue traspasado por nuestras rebeliones, y molido por nuestras iniquidades; sobre él recayó el castigo, precio de nuestra paz, y gracias a sus heridas fuimos sanados. – Isaías 53:5
Vengan a mí todos ustedes que están cansados y agobiados, y yo les daré descanso. – Mateo 11:28
No se deje engañar más por el espejo. Estamos predispuestos a una enfermedad mortal llamada pecado, por lo que no perdamos más tiempo, hagámonos una evaluación y tomemos de la receta que da vida.
Examíname, oh Dios, y sondea mi corazón; ponme a prueba y sondea mis pensamientos. Fíjate si voy por mal camino, y guíame por el camino eterno. – Salmos 139:23-24
Comentarios
Espejito espejito, dime… — No hay comentarios
HTML tags allowed in your comment: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <s> <strike> <strong>